
«La verdadera felicidad se da cuando el aspirante se regocija en su práctica»
Imparto clases de Yoga online tanto en español como en inglés. Si estás interesad@ o te gustaría saber más al respecto no dudes en escribirme a andreampr@spreadingconsciousness.com.
¿QUÉ ES EL YOGA?
A nivel práctico, el Yoga es una filosofía de vida muy beneficiosa que nos permite alcanzar equilibrio en nuestro cuerpo, en nuestras emociones y en nuestra mente. Como consecuencia, es una herramienta fantástica que nos ayuda a ser felices y a sentirnos plenos.
Sin embargo en su aspecto más profundo y espiritual, el Yoga es un camino al autoconocimiento, un camino hacia el recuerdo de quiénes somos realmente. La propia palabra Yoga proviene del lenguaje sánscrito y significa «unión«.
La definición de Yoga que yo he aprendido en mi escuela es: Yoga es la unión consciente con la esencia de uno mismo. Para conseguir eso, el Yoga nos ofrece una serie de herramientas, entre ellas las vistosas Asanas que caracterizan tanto las clases de Yoga, mayormente en occidente. Sin embargo, las Asanas son una herramienta más del Yoga, no son el Yoga en su sentido más verdadero. Simplemente son una forma de acercarnos a nosotros mismos.
Yoga es la unión consciente con la esencia de uno mismo.
¿CUÁL ES LA ESTRUCTURA DE LA CLASE DE YOGA?
Las clases de Yoga se suelen estructurar en tres partes. Los primeros minutos se suelen iniciar con otra técnica más del Yoga: el Pranayama. Prana significa energía y yama significa control. Por lo tanto, el Pranayama es la técnica que nos ayuda a controlar nuestra energía, en este caso a través de la respiración. Dicen que el Pranayama es la técnica clave del Yoga, ya que nos permite calmar nuestras emociones y pensamientos. Es la llave que nos permite controlar la energía de nuestro cuerpo y traer de nuevo paz hacia nosotros cuando experimentamos momentos de tensión. Es en realidad entonces cuando realmente podemos practicar Yoga plenamente, cuando estamos en paz.
Después de unos minutos de practicar Pranayama, el grueso de la clase se centra en las Asanas. La palabra Asana significa «asiento«. En realidad son diferentes posturas que nos ayudan a traer nuestra atención al cuerpo, a habitarlo realmente y a atenderlo. Es esa misma conciencia la práctica del Yoga y no las posturas físicas en sí, pues las posturas sin conciencia o atención no serían Yoga. En la fase de Asanas se acompaña en todo momento la postura física con la respiración consciente.
Por último, la clase finaliza con unos minutos de relajación. La relajación es la parte más importante de la clase de Yoga dado que sintetiza todo lo aprendido durante la sesión. Nos permite desprendernos de toda tensión acumulada y ayudar a refrescar nuestro cuerpo y nuestra mente. Normalmente se realiza un barrido por todas las partes de nuestro cuerpo, poniendo atención en cada una de ellas y agradeciendo el servicio que nos prestan cada día de nuestra vida.
Las clases de Yoga se estructuran en Pranayama, Asanas y Relajación. En ese orden.
¿QUÉ NECESITO PARA LA CLASE DE YOGA?
A nivel material, necesitarás una esterilla para asegurar tu comodidad y disfrute en el momento de la realización de las posturas o Asanas. Además de la esterilla, es recomendable disponer de un «taco» para sentarse sobre él en el momento del Pranayama o durante posibles meditaciones. El taco es muy útil para ayudarnos a mantener la espalda erguida. Una manta es siempre bienvenida en el momento de la relajación con la que cubrirnos, donde nos solemos quedar un poco fríos después de la actividad física de las Asanas. La ropa cómoda es por supuesto esencial para asegurar el disfrute total de la práctica y que así las prendas que vestimos no sean un impedimento para ello.
A nivel personal no necesitaremos más que interés y entusiasmo. Disposición para dar lo mejor de nosotros mismos y, sobre todo, de disfrutar. El dar lo mejor de nosotros mismos no se debe confundir con alcanzar las posturas más complicadas y complejas lo antes posible, compararnos o competir con los demás. Dar lo mejor de nosotros mismos es tomar consciencia y respetar los límites de nuestro cuerpo y al mismo tiempo ser capaces de regocijarnos en la práctica. Las clases de Yoga suelen tener una duración aproximada de una hora.
Para la clase de Yoga necesitarás una esterilla, un taco, una manta y ropa cómoda. Pero lo más importante es que traigas contigo intención y entusiasmo por disfrutar de la práctica.
¿ES EL YOGA ADECUADO PARA MÍ?
Si volvemos a la definición exacta de la palabra Yoga: «Yoga es la unión consciente con la esencia de uno mismo«, entonces es evidente que el Yoga es una práctica bondadosa para toda persona que tenga interés por conocerse mejor a sí misma. Al fin y al cabo, ese es un anhelo profundo que compartimos todos los seres humanos.
Dicho esto, como el Yoga se relaciona mayormente con ser una disciplina física, incluso aquí nos encontramos con que el Yoga es apto para todo el mundo, porque el Yoga es sencillamente traer presencia a nuestro cuerpo y a nuestras sensaciones. Así, el Yoga puede ser practicado en cada instante de nuestras vidas, pues si nos damos cuenta siempre estamos adoptando una postura o Asana. Nos sentamos, nos tumbamos, permanecemos de pie, andamos o corremos. Toda postura dinámica o estática experimentada con consciencia es Yoga. Por lo tanto, cualquier persona puede practicar Yoga si ese es realmente su deseo.
Todos experimentamos en algún momento u otro limitaciones físicas y molestias. Pero una ley crucial de la práctica del Yoga físico o Hatha Yoga es que las Asanas deben ser adoptadas con firmeza y tensión pero sin cruzar el umbral del dolor. Se enseña el respeto y el buen trato hacia el propio cuerpo. Siendo esa la base del Hatha Yoga, nadie debe temer sus limitaciones físicas pues siempre habrá un repertorio de Asanas que pueda implementar. El trabajo del instructor o instructora de Yoga es ofrecer a esa persona posturas o variantes con las que se sienta cómoda. Por lo tanto, el yoga es una herramienta de vida que acoge a todos, sin excepción.













