Por favor,
que alguien la dibuje,
que alguien la componga,
que alguien la inunde de color,
que alguien su melodía escoja.
Que alguien atreva sus pasos a bailar,
que alguien atreva su música a entonar,
que alguien atreva su voz a resonar,
que alguien atreva su verdad a expresar.
Y en el nuevo día a empezar,
al fin podría atreverse a pronunciar,
¿quién la vida mía se atrevería a mostrar?
¿Quién podría, si no es mi soñar?